Según la leyenda, los lagos de Plitvice se crearon después de una gran sequía. La sequía fue tan insoportable que los lugareños oraron por la bendición del agua durante un largo período de tiempo. Finalmente, la "Reina Negra" había aparecido en el valle con su magnífico séquito. Su aparición trajo consigo un evento largamente esperado, acompañado de fuertes vientos y tormentas eléctricas. La lluvia comenzó a caer sin descanso hasta que los niveles del agua subieron tanto que formaron lagos regionales.

El Parque Nacional de los Lagos de Plitvice se encuentra entre las cadenas montañosas de Mala Kapela y Licka Plješivica. Esta región cubre un área de casi 300 km2 y se compone principalmente de hermosos bosques y prados cubiertos de hierba.